La producción en serie domina el mercado, pero cada vez más personas se decantan por la inversión en joyería tradicional. ¿Sabes por qué?

Es una alternativa muy inteligente para llevar a diario piezas bonitas, duraderas y que no dependan tanto de modas estacionales. Además, la joyería artesanal tiene algo que la industrial jamás podrá replicar, y es la autenticidad y exclusividad. Nunca encontrarás dos piezas hechas a mano iguales, y ese ya es el mejor motivo para invertir en ellas.

La joyería artesanal no entiende de modas

Uno de los motivos por los que la inversión en joyería artesanal merece la pena es porque estás apostando por algo irrepetible. Los artesanos utilizan sus propios materiales y técnicas tradicionales, así que nunca puede haber dos joyas iguales. Esa exclusividad es lo que le da un valor añadido frente a las piezas de fábrica.

Además, lo artesanal está muy asociado con lo atemporal. Una joya hecha a mano se rige por estándares que no tienen nada que ver con la moda ni las tendencias pasajeras. Por ejemplo, un colgante Balcón Canario o una pintadera los vas a poder lucir siempre, se lleve lo que se lleve, porque están más vinculados con la tradición y las historias que se esconden detrás de cada pieza.

De hecho, las piezas artesanales cada vez tienen más valor en el mercado, porque los consumidores valoran mucho más esa autenticidad.

Los materiales nobles y sostenibles también influyen

La inversión en joyería artesanal merece también la pena porque los materiales son resistentes y nobles, como la plata de ley o las gemas naturales. Un buen ejemplo es la olivina canaria presente en muchas de nuestras creaciones. Es una piedra natural de carácter volcánico autóctona de las Islas Canarias.

A diferencia de otras joyas que se desgastan o pierden valor con el paso del tiempo, las artesanales están hechas para durar. Y ocurre justo lo contrario con su valor, porque tiende a aumentar conforme pasan los años.

Una inversión en joyería artesanal y autenticidad

Por último, también tenemos que hablar de la dimensión cultural de la inversión en joyería tradicional. Por ejemplo, en nuestro catálogo tenemos piezas que cuentan las historias de amor canarias más bonitas, las leyendas que han marcado a generaciones o las que explican nuestra historia.

El Diablo de Timanfaya o los colgantes de pintaderas aborígenes son el mejor ejemplo, y es muy difícil que otras piezas producidas en masa cuenten historias al mismo nivel. Además:

  • Es la manera de llevar contigo un recuerdo del lugar en el que has crecido, la tierra de tus abuelos o ese rincón que te ha enamorado.
  • Es un regalo perfecto para aniversarios, cumpleaños e incluso como pieza que pase de generación en generación.
  • Con el tiempo, suelen revalorizarse.

¿Necesitas más motivos para darte cuenta de que la inversión en joyería artesanal es inteligente? En el catálogo de De Lo Más Chic encontrarás piezas que van más allá de las modas y tendencias, y que cuentan las historias y leyendas más bonitas de nuestra isla. ¡Encuentra las tuyas!